Santo Domingo.-Con su pase al Todos Contra Todos, los Leones del Escogido salvaron el honor de la fanaticada capitalina, cuando aparentemente estaban fuera de circulación.
La novena escarlata tuvo que sacar de abajo y lograr cuatro victorias consecutivas, en un momento en que nadie pensaba que el conjunto, al igual que los Tigres del Licey, lograría clasificar.
Sin embargo, la victoria roja ante los felinos el pasado viernes, con la derrota de los Gigantes ante las Águilas, dio un respiro que al final se convirtió en la realidad escarlata. El trabajo de Daniel Cabrera en el partido del viernes sepultó las esperanzas azules.
El Escogido, campeón de liga y de la Serie del Caribe, tuvo en el zurdo Johnson su gran estandarte en el partido decisivo, pues el abridor trabajó 7.1 entradas de dos carreras, una de ellas limpia, no otorgó boletos y abanicó a 11 bateadores.
Johnson (1-0) realizó 101 lanzamientos con apenas tres días de descanso. El martes lanzó 6 entradas en blanco ante los Toros del Este.
Los Gigantes
Sin embargo, el equipo de los Gigantes del Cibao, que se mantuvo en la ruta de la clasificación en casi todo el torneo, no pudo al final lograr tan anhelado objetivo.
Ya restando un encuentro, la dirigencia botó al mánager Héctor de la Cruz (La Manta), quien había mantenido al equipo en la pelea, pero había caído en una mala racha.
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